La intensa participación de la Compañía General de Aceptaciones en el sector industrial no estuvo limitada al ámbito financiero, sino que, con su particular visión de los valores culturales mexicanos promovía, a través de danzas folclóricas, el conocimiento de nuestras tradiciones. Francisco F. Maldonado, director general de la compañía, gran promotor de esta visión y política institucional, integró un equipo encabezado por Silvia García Garza, quien junto con María Luisa Areu (1915-2006) y Jesús Daniel Andrade González (1927-1991), colaboró de manera permanente en los proyectos culturales de la empresa.
Desde finales de 1960 y hasta 1985, este equipo viajó de manera constante por todo el territorio mexicano y adquiría la indumentaria necesaria para desarrollar su activa labor de difusión cultural. Con el paso del tiempo, los espectáculos y la presentación de la indumentaria con una intención didáctica a la usanza de los desfiles de modas, fueron muy solicitados para presentaciones en convenciones y obras de caridad.
La compañía también apostó por el rescate de colecciones, al adquirir piezas que estaban a la venta del célebre coleccionista, promotor cultural y uno de los grandes fotógrafos mexicanos del siglo XX, Luis Márquez Romay (1899-1978). De esta manera comenzó a constituirse un vasto acervo de trajes tradicionales y otras prendas, verdaderas joyas de la indumentaria tradicional que hoy, cincuenta años después de su adquisición, forman parte del patrimonio cultural de Monterrey, de México y del mundo.
Con la conformación de grupo Financiero Serfin (1971), este acervo de origen regiomontano se convirtió formalmente en la Colección de Trajes Regionales Serfin, con sede en Monterrey.