SINOPSIS
Durante la Revolución mexicana, Mónica, cantante del Café Colón, estaba comprometida con el general federal Gumaro Valencia (Luis Beristáin), pero no se casaron debido a que él tuvo que retirarse ante la llegada de los revolucionarios. Poco después, el general zapatista Sebastián Robles (Pedro Armendáriz) trata de conquistar a Mónica a partir de la coquetería que ella le demuestra. A pesar de que Sebastián es un hombre rudo, la cantante del cabaret empieza a corresponderle. Los problemas inician cuando aparece Gumaro a reclamar unas joyas robadas por los zapatistas. El conflicto pone a los personajes a dudar de sus sentimientos, sin embargo, el final parece ofrecer al espectador la posibilidad de verla a ella plena y feliz por primera vez.
El vestuario realizado por Valdés Peza para esta cinta fue muy elaborado y sorprendente; entre ellos, aparece adaptado el vestido icónico que María vistió en La mujer de todos. La actriz nuevamente luce ataviada con vestido de novia, pero a diferencia de lo sucedido en La devoradora y años después en La Valentina, portar ese traje no le auguró la muerte o la fatalidad.