El fotógrafo franco-americano Augustus Le Plongeon (1826-1908) viajó al Museo Británico para estudiar de manera más profunda las fuentes mesoamericanas; ahí conoció a su esposa, Alice Dixon, quien se convertiría en el brazo derecho en sus exploraciones. Ambos llegaron a Yucatán en 1873, en busca una vez más del Egipto perdido en la civilización maya y fueron los primeros en investigar y fotografiar Chichén Itzá, donde a una de las figuras encontradas la bautizaron como el “Chac mool”.