Hay quienes dicen que lo antiguo era mejor que lo actual. En muchos casos es cierto, pero no es el caso del tejido doble. Las mujeres otomís del Valle del Mezquital continúan elaborando esta técnica en extremo compleja mientras que, en Nayarit, las tejedoras coras han inventado o descubierto recientemente variantes que solo existían en evidencias arqueológicas andinas, como el ligamento triple e incluso cuádruple.
Estos ligamentos múltiples consisten en tejer, en un mismo telar, dos, tres o cuatro urdimbres respectivamente, es decir, enlazando mediante los diseños dos o más telas en un mismo lienzo, cada uno con su propia trama. Los diseños se logran pepenando manualmente secciones de hilo de las distintas urdimbres, enviándolos al anverso o al reverso de la tela, respectivamente. Se trata de una tecnología que exige una comprensión matemática avanzada de varios tejidos simultáneos.