Pocas cosas son tan exclusivas de México como el tejido en curva, técnica única en el mundo, utilizada para hacer el quechquémitl. De origen mesoamericano, supuestamente inventada por los antiguos toltecas, el tejido en curva se desarrolló con un alto grado de complejidad y refinamiento tecnológico.

En esta estructura, una parte de la urdimbre del telar se va cortando mientras se avanza en la construcción de la tela para convertirse en trama, de manera que el lienzo da vuelta sin necesidad de cortes ni costuras. La tela resultante tiene una forma triangular o redondeada, con una franja de color lograda con la técnica de curva. El armado del quechquémitl se realiza cuando ya se tejieron dos lienzos curvos de forma idéntica.

Este tipo de tejido se sigue realizando en algunas localidades de cultura nahua, otomí y totonaca de los estados de Hidalgo, Puebla y Veracruz. Por desgracia, este conocimiento está a punto de extinguirse, pues solo es dominado por unas cuantas sabias de edad avanzada y en muy pocas comunidades.