Derivado de los tradicionales braseros (fogones) que soportan los comales para hacer tortillas, surge esta pieza, que puede usarse para cocinar o mantener caliente la comida sobre la mesa, poniendo carbón en su interior.
El intenso color rojo de esta pieza se logra con un baño de tierra especial, proveniente de un cerro cercano a la comunidad y bruñido delicadamente con cuarzos.