En México, la tradición del Día del Muertos, señala que los difuntos visitan a los vivos, pero Maximiliano y Carlota, empezaron su paseo desde el martes en el centro comercial, el cual no piensan abandonar hasta el viernes 3 de noviembre.

Como cada año, el Museo de Historia Mexicana y Galería Monterrey sorprenden a sus paseantes con un montaje dedicado a los difuntos, en esta ocasión en alusión a la exposición temporal “Maximiliano y Carlota, La ilusión de un imperio”.

Maximiano de Habsburgo (Viena, 1832- 1867) y Carlota Amelia de Bélgica (Bélgica, 1840- 1927) encabezaron el Segundo Imperio Mexicano de 1864 a 1867, auspiciados por Napoleón III de Francia y el partido conservador mexicano.

El matrimonio europeo emprendió obras urbanas y proyectos que sobrevivieron a su fallido intento de dominar a México, que era legítimamente gobernado por el presidente Benito Juárez García.

La ofrenda está compuesta por tres elementos, la representación de Castillo de Chapultepec, que durante su gobierno fue reconstruido y ampliado, pues el edificio representaba el escenario perfecto para la perspectiva monárquica de Maximiliano y Carlota, quienes también construyeron el paseo de emperadores, hoy conocido como el paseo de la Reforma.

Tanto Maximiliano como Carlota están representadas por dos calaveras gigantescas vestidas a la usanza imperial, el diseño de sus ropajes está elaborado a mano con papel de china.